Se recuperó de coronavirus y con su dura historia quiere generar conciencia

La incredulidad de la gente ante el coronavirus, a pesar de los fuertes testimonios de profesionales de la salud, hizo que Luis Escaf, uno de los primeros en contagiarse del virus en Barranquilla, llamara seriamente la atención con su historia.

"Es muy importante que la gente entienda que es una enfermedad muy grave. La gente piensa que esto es una cosa de juego", manifestó Luis.

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Escaf es oftalmólogo y fue uno de los primeros, en la ciudad de Barranquilla, en ser diagnosticado con covid-19. Todo empezó cuando tuvo los primeros síntomas de fiebre alta en las noches.

"Y ya no pude más y dije me voy para la clínica. Llegué y me dijeron 'hay que hospitalizarlo'", afirma.

Cerró sus ojos siete días en cuidados intensivos a la espera de un ventilador en coma inducido, como era de esperarse su familia sufrió por lo que le ocurría.

Su hijo es médico en Toronto, Canadá, por eso investigaron, junto con médicos de Barranquilla y de la Fundación Valle del Lili, porque estaban luchando a ciegas contra un virus desconocido.

"Se copió un protocolo que se estaba manejando en Italia", dijo.

También explicó que la enfermedad producía trombos que matan, una situación dura de la que muchos no se han concienciado y se exponen día a día sin importar las graves consecuencias que podrían acarrear por sus actos.

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Mientras que Escaf estuvo en coma, surgió un falso mensaje por redes sociales que decía que él había muerto. Como a su familia no la dejaban ingresar a verlo, vieron ese chat y fueron engañados como muchos otros.

Tres meses después de su salida triunfal de la clínica Escaf es un ejemplo, y quiere que después de su historia desaparezcan las aglomeraciones y que los colombianos abran sus ojos sin necesidad de acercarse al frío de la soledad que conlleva el coronavirus.