"Bogotá hoy tiene 2.300 mujeres en riesgo de feminicidio": secretaria de la Mujer

Cristian Camilo Rincón, de 31 años, es el responsable de un lamentable hecho ocurrido el pasado domingo 14 de mayo, Día de la Madre. Este hombre le quitó la vida a su pareja Érika Aponte, propinándole varios disparos al interior del centro comercial Unicentro.  

En su pasado judicial este personaje ya registraba anotaciones por lesiones y daño en bien ajeno. Sin embargo, en el sistema penal acusatorio no registraba antecedentes de condenas o de procesos activos.

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Según familiares de la víctima, las peleas e inconvenientes entre ambos venían desde hace 3 años. Por ello, se conoció que el pasado jueves 11 de mayo Érika Aponte fue a la Casa de Justicia, en horas de la mañana, y las instrucciones que le dieron fue poner la denuncia ante la comisaría de familia. La mujer lo hizo mediante llamada telefónica, y fue entonces cuando le impartieron cuatro medidas de protección para apoyarla en la delicada situación que vivía con su expareja.

Claudia López aseguró que a Erika Aponte le habían brindado protección: ¿entonces qué pasó? 

La alcaldesa de Bogotá se refirió al caso y señaló que se habían adoptado las medidas necesarias para garantizar la protección de la mujer; sin embargo, se cuestiona si estas acciones fueron suficientes. A esta hora la Procuraduría revisa si la mujer realmente tuvo las medidas necesarias para su protección. En A lo que vinimos de Noticias RCN, la secretaria de la mujer, Diana Rodríguez Franco, se refirió al caso.

• ¿Qué falló en este proceso? Ella denuncia y ustedes adoptan medidas, pero entonces, ¿por qué Érika termina asesinada?

El machismo está desbordando las capacidades que nos da la ley. Aquí se aplicaron todas las medidas de protección, pero agresores como estos llegan, se deciden y si quieren cometer el asesinato lo van a cometer, eso es lo que está pasando, que la ley se queda corta. 

• En cuanto al asesino, ¿qué medidas adoptaron con él cuando conocieron de las amenazas?

El agresor fue notificado de las medidas de protección. Todo eso pasó en menos de 24 horas. Bogotá hoy tiene 2.400 mujeres en riesgo de feminicidio y no hay posibilidad de poner un policía para cada una, por eso hay que actuar y este caso muestra como se cumplió toda la ruta de atención, pero necesitamos hacer más. Hemos salvado muchas mujeres en casas refugio, en este caso infortunadamente pasó y ella ya no está con nosotros, además hay un niño huérfano. 

• ¿Por qué cada vez más las mujeres estamos siendo víctimas?

Tenemos que dejar de ver las violencias contra las mujeres como algo del ámbito privado, tenemos que movernos actuando cuando vemos que una mujer está nerviosa o sale corriendo de su lugar de trabajo, podemos llamar a la Policía, invitarla a denunciar. 

• ¿Cómo ganar la confianza para que las mujeres crean en que denunciar es la mejor forma?

Yo entiendo y por eso reprochamos y acudimos a acompañar a la familia de Érika. Por eso hacemos esa invitación a que sigamos alertando, a que si la sociedad conoce un caso no se demore. Érika reportó 11 casos de violencia, seguramente si algún familiar hubiera alertado podríamos haber prevenido esto antes. Necesitamos que toda la sociedad se sume. 

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