La historia detrás de la banda que instrumentalizó a sus hijos para vender droga en Bogotá
Meses después de la captura de los miembros, el investigador entregó detalles inéditos sobre el operativo que hubo.
Noticias RCN
08:22 p. m.
A finales de julio, las autoridades le pusieron punto final a una banda conocida como Los Arrayanes, la cual se dedicaba a vender droga en Bogotá.
18 miembros de la banda fueron capturados y enviados a la cárcel. Su accionar se centró en la localidad de Santa Fe, centro de la ciudad. Lo más indignante es que los criminales instrumentalizaron menores.
¿Cómo operaba la banda?
Los cabecillas fueron identificados como Jeyson Franceny León Borja o ‘Jeyson’ y Edilberto Urias Forero Rojas o ‘Cucaracho’. Otros de los criminales se llaman: Cristian Fabián Suárez Garzón o ‘El Enano’, Alfredo Junior Cabello Escobar o ‘Cabello’, Jaider Jair Hernández Corpas o ‘El Costeño’, Ruth Neldy Martínez Sanabria, Aderis Sanabria Montaña, Mireya León Borja y Claudia Milena Arenas, alias La Gorda.
Casi cinco meses después, la Secretaría de Seguridad entregó detalles sobre lo que hubo detrás de estas capturas. En el programa Voces de Ciudad, el investigador del caso, quien mantuvo el anonimato, habló.
Por un lado, manifestó que el punto de partida para acabar con su imperio fue la denuncia de una persona. Tras el llamado, comenzó una investigación que tardó un año y cuatro meses en dar con el golpe certero.
Los locales y menores instrumentalizados: pruebas contundentes
Las pesquisas llevaron a la carrera novena con calle 15. Este lugar fue clave, debido a que había locales que eran usados como fachada. En su interior, estaba la guarida de los delincuentes.
Con el paso de los meses, se fue conociendo el modus operandi que usaban para pasar desapercibidos. Además, se revelaron las horas en las que actuaban.
La instrumentalización fue con sus propios hijos, jóvenes de cinco a 10 años. “Escondían la droga para evitar que las autoridades los pudieran requisar. Era una forma distractora”, explicó el investigador.
Un agente encubierto se adentró en los tentáculos de Los Arrayanes. Esta persona se ganó la confianza del resto de criminales, a tal punto que los acompañó en las ventas que hacían en bares o restaurantes. Todo fue quedando en video.

