Ejército intensificará operativos en el Chocó para contrarrestar amenazas del ELN y evitar otro paro armado
Este domingo se cumplen 12 días de los enfrentamientos entre el ELN y el Clan del Golfo en el Chocó.
Noticias RCN
01:10 p. m.
La crisis en el departamento del Chocó, se agudiza mientras el Ejército Nacional intensifica sus operaciones contra grupos armados ilegales en la región.
ELN anunció paro armado en el Chocó
Tras 12 días de enfrentamientos entre el ELN y el Clan del Golfo, miles de personas permanecen confinadas en sus hogares, mientras las autoridades militares reportan importantes incautaciones de armamento.
En las últimas horas, el Ejército incautó más de 30 fusiles, 3 ametralladoras, granadas y material de intendencia y comunicaciones en la zona del Medio San Juan.
Además, cerca de Istmina, lograron ubicar una armería, lo que representa un duro golpe a la infraestructura de los grupos ilegales que operan en la zona.
Frente a las nuevas amenazas del ELN de restringir la movilidad por el río San Juan, el Ejército ha sido enfático en señalar que no se trata de un paro armado.
Según las autoridades militares, esta es una estrategia utilizada por el grupo guerrillero para facilitar el tráfico de drogas y realizar acciones que podrían afectar a la comunidad.
La situación en Istmina, población del sur de Chocó, es particularmente tensa. Las calles lucen vacías, con los habitantes intentando resguardarse de las balas.
Caos en el Chocó por guerra entre el ELN y el Clan del Golfo
La zozobra y el temor persisten entre la población civil, que se ve atrapada en medio del fuego cruzado entre los grupos armados ilegales.
“No es un paro armado, es un delito que se llama constreñimiento a la población y da de 48 meses a 120 meses de cárcel”, indicó el general William Caicedo, comandante de la brigada 15 del Ejército Nacional.
Ante este panorama, el Ejército ha asegurado que mantendrá su despliegue operacional para brindar tranquilidad y seguridad a la población.
Sin embargo, las afectaciones por las nuevas amenazas del ELN podrían agravar aún más la crisis en este territorio.
Los habitantes de la región insisten en su súplica para que los grupos ilegales los dejen al margen del conflicto.
La población civil, principal víctima de esta situación, se encuentra en un estado de vulnerabilidad extrema, con limitaciones en su movilidad y acceso a servicios básicos.
La comunidad internacional y organizaciones de derechos humanos han expresado su preocupación por la escalada de violencia en el Chocó.
Se espera que las autoridades nacionales intensifiquen sus esfuerzos para garantizar la seguridad y el bienestar de la población civil en esta región azotada por el conflicto armado.