Emberá están atacando con machetes a funcionarios en Bogotá y usando niños para lanzar piedras
La Alcaldía denunció el uso de menores en actos violentos y advirtió consecuencias legales.

Noticias RCN
06:18 p. m.
En medio de los continuos intentos por recuperar el Parque Nacional de Bogotá, escenario de asentamientos indígenas desde hace años, la administración distrital denunció graves hechos de violencia que involucrarían directamente a miembros del pueblo Emberá.
Dos incidentes recientes, uno con armas blancas y otro con menores lanzando piedras, encendieron las alarmas en la Alcaldía, que ahora prepara una ofensiva jurídica contra quienes resulten responsables.
Emberá están atacando con machetes a funcionarios en Bogotá
Durante el balance diario entregado por la Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia de Bogotá, el Distrito reveló que al menos dos funcionarios del Acueducto fueron intimidados con machetes por miembros de la guardia indígena Emberá.
Los hechos ocurrieron cuando los trabajadores adelantaban labores técnicas en el sector del Parque Nacional, como parte del plan de restauración ambiental que la Alcaldía viene implementando en la zona.
Aunque no se registraron lesiones físicas, el secretario de Seguridad calificó lo sucedido como un hecho “gravísimo” que “no puede ser tolerado en una ciudad que respeta el trabajo institucional y el cumplimiento de la ley”.
Según el funcionario, las amenazas con machetes constituyen una forma de coacción que ya fue documentada con pruebas audiovisuales y será llevada ante la justicia penal.
Emberá están usando niños para lanzarle piedras a funcionarios en Bogotá
Aún más delicado resultó el segundo incidente reportado por el Distrito, pues de acuerdo con la versión oficial, niños y adolescentes fueron incitados a lanzar piedras contra un grupo de funcionarias del área de espacio público, quienes se encontraban también en el lugar apoyando las tareas de limpieza y ordenamiento.
El ataque quedó registrado en video y fue descrito por las autoridades como una utilización directa de menores en actividades violentas, lo cual podría configurar un agravante legal.
“Esto no es un hecho aislado. Estamos viendo una escalada en los niveles de agresividad que pone en riesgo no solo a nuestros servidores públicos, sino a toda la ciudadanía”, dijo el secretario, quien añadió que ya se dio inicio al proceso para instaurar denuncias penales por agresión, obstrucción a funcionario público, uso indebido de menores y tentativa de lesiones personales.
El Distrito resaltó que este tipo de agresiones no pueden ser normalizadas, independientemente del contexto cultural o étnico de los responsables.
De momento, las autoridades no han revelado aún si se identificaron plenamente a los autores materiales de los hechos, pero se confirmó que hay videos, fotografías y declaraciones de testigos que están siendo incorporados como evidencia en los procesos judiciales que se avecinan.
Por ahora, las tareas de recuperación en el Parque Nacional continúan, aunque con un reforzamiento del acompañamiento policial y mayor presencia de funcionarios de derechos humanos, en un intento por evitar nuevas confrontaciones.