La mentira que selló el destino del Palacio de Justicia: el testimonio de Yesid Reyes
El abogado tenía 27 años cuando le tocó enfrentar el golpe más duro de su vida y de la justicia en Colombia: la toma del Palacio.
Noticias RCN
04:12 p. m.
Yesid reyes, hijo del expresidente de la Corte Suprema de Justicia, Alfonso Reyes Echandía, habló con Noticias RCN y reveló detalles inéditos de la negociación que intentó llevar a cabo desde su casa mientras la vida de su padre estaba en vilo.
Testimonio de Yesid Reyes sobre la toma del Palacio de Justicia
El hombre hizo duros cuestionamientos a la nula respuesta a dialogar con los guerrilleros que asaltaron el Palacio por parte del presidente Belisario Betancur hace 40 años.
“Eso rompió la dinámica de renovación de la Corte, en buena parte esa Corte Suprema de Justicia había conservado unos estándares muy altos, porque la renovación se había dado de manera paulatina con un gran consenso al interior de la corporación”, indicó Reyes.
El abogado tenía 27 años cuando le tocó enfrentar el golpe más duro de su vida y de la justicia en Colombia: la toma del Palacio.
Su papá, Alfonso Reyes Echandía, en ese entonces presidente de la Corte Suprema de Justicia, era uno de los magistrados que fueron secuestrados por el M-19, quien suplicó que cesara el fuego.
Pocas personas saben el origen de esa llamada y el momento de tensión en ese cuarto piso del Palacio de Justicia. Sin embargo, Yesid Reyes, habló dos veces con su padre durante la toma hasta perder su rastro.
“En la primera oportunidad que hable con él me dijo que un comando del M-19 se había tomado el edificio, que parecían tener intenciones de negociar, pero que para poder iniciar las conversaciones era imprescindible que hubiera un cese al fuego por parte de las autoridades que estaban disparando contra el Palacio”, detalló.
En medio de la llamada, el comandante guerrillero del M-19 hizo una advertencia que marcaría el futuro de lo que sucedería después.
“En esa oportunidad el comandante Otero nos concedió un plazo de 15 minutos para intentar conseguir ese cese al fuego y en caso contrario, dijo el comandante Otero, que todos iban a morir en el Palacio de Justicia”, añadió.
Pasaron los 15 minutos y no hubo cese al fuego, y la desesperación se apoderó de Yesid, quien nuevamente logró hablar con su padre en una segunda llamada.
“Lo que me dijo mi padre en ese momento, es que él había logrado hablar con el director de la Policía y que el director le había dicho que la orden de cese al fuego ya estaba dada, que lo que había era un problema de comunicación ente el Palacio de Nariño y las tropas que habían recibido esa orden”, agregó Reyes.
A pesar de que el entonces presidente de la Corte Suprema de Justicia tenía información de que se había dado la orden del cese al fuego, la realidad fue otra.
“Evidentemente, no hubo una orden del presidente de la República para cesar al fuego, eso fue una mentira del director de la Policía a mi padre”, confesó.
Un detalle que, sin duda, plantea una responsabilidad directa del estado. “La responsabilidad del Estado, por dos razones, una por haber retirado la vigilancia del Palacio de Justicia, que sin ninguna duda facilitó la toma del edificio por parte del M-19 y segundo por abuso el tema de la fuerza”.
Según su experiencia como ministro, el camino fue equivocado por el presidente de aquel entonces.
“Fue una forma de resolver conflictos de manera violenta en lugar de haber recurrido a la posibilidad de la negociación que hubiese salvado un centenar de vidas en la toma del Palacio”, expresó Reyes.
Lo cual envió un mensaje directo al pueblo colombiano respecto a una de las ramas del poder público.
“Eso fue como hacer visible que de las tres ramas del poder público, la que menos le importaba era la rama judicial, no se respetó a una de las cabezas de las ramas del poder público y la rama judicial. ¿Qué protección se podía esperar como juez o magistrado de tribunal o como funcionario judicial si el estado o no había sido capaz de proteger a la cúspide de la rama judicial?”, cuestionó.
A pesar de ser la última persona que habló con su padre, el dolor lo acompaña desde lo académico con la misma pasión: el derecho.
“Es un recuerdo en todo caso muy continuo, tenga en cuenta que me dedique a lo mismo de mi padre, sigo leyendo, estudiando, trabajando, temas de derecho penal, mi biblioteca tiene una buena parte de los libros que eran de mi padre. Dicto clase en la universidad donde él también dictó”.
El recuerdo y los cuestionamientos aparecen en la mente del exministro Yesid Reyes cuando se debían tomar decisiones para salvar la vida de su padre, y no se tomaron, dándole rienda suelta a los narcotraficantes para cumplir su cometido.
“Lograron deshacerse de una Corte Suprema Justicia que resultaba incómoda porque tenía a su disposición el manejo de las extradiciones, ya había ordenado varias extradiciones y porque al final la Asamblea Nacional Constituyente prohibió la extradición de colombianos”, finalizó.
La corte de las luces no volverá para el exministro Reyes. Sin embargo, las distintas investigaciones, acercamientos a la verdad, reafirman su teoría de la mentira de la que fue víctima su papá en medio de su secuestro de un supuesto cese al fuego, el cual nunca se dio.

