"Las armas nos las dio la Policía de Haití": exmilitar colombiano señalado del crimen de Jovenel Moise

Ya se cumplió un año desde aquel 7 de julio del 2021, cuando el mundo conoció la noticia del asesinato de Jovenel Moise, entonces presidente de Haití, quien fue víctima de varios disparos cuando se encontraba en su residencia ubicada en Puerto Príncipe.

Un año del asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moise

Con el avance de las investigaciones se conoció que el crimen contó con la presencia de varios militares retirados procedentes de Colombia, al menos 26 hombres que habrían pertenecido a las Fuerzas Militares.

Uno de ellos, Edwin Blanquicet, habló en exclusiva en La FM, donde reveló, entre otras cosas, los detalles de su experiencia tras ser detenidos y acusados del magnicidio. El sargento viceprimero dijo que las confesiones grabadas por funcionarios de Interpol Colombia son falsas y hechas bajo prácticas de tortura.

“Las declaraciones que dieron nuestros compañeros son falsas; duramos 30 días con esposas en una celda de un diámetro de 3 x 6 para 20 personas. Dormíamos apretados; gente herida, gente que rogaba porque la llevaran al dispensario. A esos compañeros que salieron en esas grabaciones, se los llevaban tipo 7:30 o nueve de la noche unos encapuchados a sacarlos. Cuando volvían en la madrugada venían llorando, golpeados, con las uñas arrancadas, orinaban sangre, defecaban sangre”.

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Durante la entrevista, Blanquicet detalló lo ocurrido la noche del 6 de julio y la madrugada del 7, cuando fue capturado. Cuenta que a pesar de que alzaban la mano en señal de rendición, seguían disparándoles, incluso atacándolos con granadas.

A Capador lo mataron con una granada y luego le dispararon en la cabeza

Blanquicet, quien pasó 20 años en el Ejército donde fue entrenado como francotirador y en cursos contraguerrilla, pidió a la vicepresidenta y canciller Marta Lucía Ramírez, mayor atención a su situación, asegurando que son víctimas de tortura física y psicológica.

“Uno en ese momento no quería que el día se acabara porque cuando llegaba la noche venían los encapuchados a torturarnos. Nos pegaban en las costillas, en los testículos en el trasero”, reveló en entrevista con La FM.

Las revelaciones de exmilitar señalado del magnicidio de presidente de Haití

Preguntado por si en algún momento dudó de algunos de sus compañeros, especialmente quienes lo reclutaron y coordinaron el ataque, Blanquicet respondió que de haber sabido para qué era, ninguno habría participado.

“Soy padre de familia, soy hijo y soy hermano. Si alguno hubiera sabido que era para eso, ninguno se habría metido en este problema. Estamos hablando de un magnicidio de un jefe de Estado y no lo hicimos nosotros. Somos militares con más de 20 años en la Institución. Si eso hubiese sido así, tendríamos planes de extracción. Al presidente supuestamente le dispararon doce veces y le fracturaron una pierna. Nosotros somos formados en derechos humanos; explíqueme cómo íbamos a tener tiempo para dispararle 12 veces y fracturarle una pierna”, puntualiza Blanquicet.

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¿Órdenes de la Policía de Haití?

El exmilitar señaló también que llegaron hasta la residencia del presidente Jovenel Moise porque el director de la Policía de Haití los llamó solicitando apoyo tras una orden de captura contra el mandatario, la cual habría expedido un juez.

Estando en la casa del jefe de Estado de Haití, dos grupos de colombianos habrían recibido fusiles Galil de la Policía de ese país para después desplazarse con ellos hasta la ubicación de Jovenel Moise para cumplir con la orden judicial.

Así las cosas, siete camionetas ocupadas tanto por exsoldados colombianos e integrantes de la Policía haitiana llegaron hasta la casa presidencial, donde la guardia no se habría resistido hasta que empezaron a escuchar disparos dentro de la vivienda, dijo Edwin Blanquicet.

Sobre las 2:15 de la madrugada habrían encontrado sin vida al presidente Jovenel Moise.

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Desde la cárcel en Haití, Blanquicet pidió garantías al Gobierno colombiano para ejercer la defensa de los exmilitares señalados del asesinato.

“Una juez haitiana dijo que había muchas irregularidades en el caso y fue amenazada. La tuvieron que sacar del caso (…) “El gobierno no nos ha dado ni una pastilla y alguien entregó nuestros nombres y datos personales de nuestras familias para que fuesen amenazadas. Nos vamos a pudrir vivos aquí y somos inocentes”, declaró.

Escuche aquí la entrevista completa