¿Por qué aparecen los orzuelos y cómo prevenirlos?
Los secretos para saber por qué aparecen los orzuelos y cómo prevenirlos.
Noticias RCN
11:57 a. m.
Los orzuelos, esas pequeñas protuberancias rojas y dolorosas que aparecen en el párpado, son una afección ocular común que, aunque generalmente inofensiva, puede resultar bastante incómoda.
Se presentan como una inflamación aguda de las glándulas sebáceas o sudoríparas ubicadas en el borde del párpado, específicamente las glándulas de Meibomio (internas) o de Zeis y Moll (externas).
Entender por qué aparecen los orzuelos y cómo prevenirlos es clave para mantener una buena salud ocular y evitar su recurrencia.
Principal causa de los orzuelos
La principal causa de los orzuelos es una infección bacteriana, comúnmente por Staphylococcus aureus, una bacteria que reside de forma natural en la piel.
Según la Academia Americana de Oftalmología (AAO), esta bacteria puede obstruir y colonizar las glándulas del párpado, provocando la inflamación y la formación del pus característico del orzuelo.
Factores como tocarse los ojos con las manos sucias, el uso de maquillaje caducado o mal retirado, y las lentes de contacto mal higienizadas, aumentan el riesgo de introducir estas bacterias.
Otras condiciones médicas también pueden predisponer a su aparición. La blefaritis, una inflamación crónica del borde del párpado, está estrechamente relacionada con los orzuelos recurrentes.
Un estudio publicado en el British Journal of Ophthalmology ha señalado que la disfunción de las glándulas de Meibomio, un componente de la blefaritis, crea un entorno propicio para el crecimiento bacteriano y la obstrucción glandular.
¿Cuáles son los principales factores de riesgo que explican por qué aparecen los orzuelos?
Además de la higiene deficiente y la blefaritis, existen otros factores de riesgo. Las personas con enfermedades de la piel como la rosácea o la dermatitis seborreica tienen una mayor probabilidad de desarrollar orzuelos, debido a la inflamación crónica que afecta las glándulas cutáneas.
La diabetes, al comprometer el sistema inmunológico, también puede incrementar la susceptibilidad a las infecciones bacterianas, incluyendo las oculares.
El estrés, aunque no es una causa directa, puede debilitar las defensas del cuerpo, haciendo que sea más vulnerable a las infecciones.
Un estudio de la Journal of Medical Microbiology ha explorado la relación entre el estrés psicológico y la proliferación de bacterias estafilocócicas.
¿Cómo se pueden prevenir eficazmente los orzuelos para evitar su aparición recurrente?
La prevención es la mejor estrategia para combatir los orzuelos. La higiene ocular rigurosa es fundamental: lavarse las manos con frecuencia, especialmente antes de tocarse los ojos o manipular lentes de contacto, es crucial.
La AAO recomienda limpiar los párpados regularmente con agua tibia y jabón suave o toallitas específicas para ojos, especialmente si se usa maquillaje.
Es vital retirar todo el maquillaje antes de dormir y evitar compartir cosméticos oculares o utilizar productos caducados.
Para quienes usan lentes de contacto, seguir estrictamente las normas de higiene y desinfección es indispensable.
En casos de blefaritis o orzuelos recurrentes, los oftalmólogos pueden recomendar compresas tibias diarias y masajes suaves en los párpados para desobstruir las glándulas.
Al entender a fondo por qué aparecen los orzuelos y cómo prevenirlos, se pueden adoptar hábitos que protejan la salud visual y mejoren la calidad de vida, reduciendo la incidencia de estas molestas afecciones.


