Así camuflan drogas y celulares en las cárceles de Colombia

Noticias RCN fue testigo de una grave situación que se presenta en las cárceles del país con el regreso de las visitas. Aumentó de una manera alarmante la cantidad de droga decomisada, pero la clave para lograr ubicarla está en perros especialmente entrenados.

En la cárcel La Tramacúa de Valledupar, una de las de mayor seguridad del país, ingresó el grupo de operativos especiales del Inpec en la búsqueda de uno de los principales dolores de cabeza de los centros penitenciarios: la droga ingresada bajo la modalidad de los famosos ‘correos humanos’.

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Durante el operativo, encuentran estupefacientes debajo de las sillas de visita pegada en paquetes. También en las celdas, en las zonas de aseo, hallan especialmente marihuana y cocaína, y hasta detrás de los inodoros. Rompen las baldosas y esconden detrás las bolsas negras.

Pero ¿cómo logran descubrirlos? resulta clave la ayuda de perros. Su agudo olfato se ha convertido en el terror de los delincuentes.

“La técnica consiste en asociar el perro a unos olores característicos y se les hacen unos refuerzos mediante unos motivadores”, señaló el dragoneante Hermidez García, guía canino de la Cárcel Modelo.

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En las cárceles del país hay 525 perros entrenados en la detección de sustancias que ya han logrado la captura de 40 personas solo durante este año.

“Es una cosa maravillosa porque el perro es incorruptible”, asegura el teniente Diego Devia, coordinador del grupo de guías caninos del Inpec.

Según las autoridades, en 2021, desde que se reactivaron las visitas,  han sido incautados 33.6 kilos de droga entre marihuana y cocaína, 307 celulares y 191 armas.

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