En el Día de la salud mental, joven colombiana esperó en urgencia por crisis nerviosa y nunca la atendieron
Tras ocho o diez horas, decidió solicitar su salida voluntaria del hospital y regresar a su casa.
Noticias RCN
01:46 p. m.
En el Día de la salud mental, el pasado viernes, 10 de octubre la joven colombiana conocida en redes como Ana Mar tuvo que enfrentarse a las limitaciones del sector salud para atender a pacientes psiquiátricos.
Según dijo, fue irónico que, precisamente, ese día, ningún hospital quisiera recibirla porque su EPS, Famisanar, ha ido perdiendo los convenios y, finalmente, al ser admitida en un hospital, estuvo esperando a ser atendida durante horas.
En un video compartido en la plataforma TikTok explicó que se puso en contacto con “la línea 106 (El poder de ser escuchado) me atendieron bien, me enviaron una ambulancia y fuimos al hospital”.
Ana Mar esperó durante horas a ser atendida, al igual que otros pacientes, y terminó rindiéndose:
Luego de ser rechazada en varios centros asistenciales, Ana Mar creyó haber encontrado un lugar en el que podrían ayudarla, pero, en cambio, se enfrentó a una situación que agravó su estado:
“Estuve en una camilla, en el suelo, esperando a ser atendida, pero no había atención por psiquiatría, así que opté por solicitar mi salida voluntaria. Llevaba ocho horas esperando a que alguien me atendiera y, a duras penas, me visitó un médico general y remitió mi historia clínica”.
No era la única. En su video señaló que “es muy irónico, porque se habla de conmemorar el día de la salud mental, pero en Colombia, la atención prioritaria a urgencias psicológicas no existe. Ese día estábamos cinco o seis personas esperando atención de salud mental”.
¿Pacientes amarrados y sin atención médica?
Antes de rendirse en el hospital y solicitar la salida voluntaria, la joven bogotana presencio los horrores a los que son sometidos los pacientes psiquiátricos, por la falta de personal y negligencia el personal disponible.
Otros pacientes con problemas de salud mental “llevaban muchas horas en el hospital, habían perdido la paciencia, se estaban tornando violentos y agresivas, porque llevaban muchas horas esperando. tuvieron que amarrarlos y para mí era muy curioso presenciar esa escena”.
Su conclusión, tras la tortuosa experiencia, no es otra que “la salud mental en Colombia está muy deteriorada”.

