Confirman la segunda muerte tras ataque a centro de detención de migrantes en EE. UU.
El atentado, registrado el 24 de septiembre, fue perpetrado por Joshua Jahn, un estadounidense de 29 años que disparó desde la azotea de un edificio cercano antes de quitarse la vida.
Noticias RCN
04:30 p. m.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum,
confirmó este martes el fallecimiento de Miguel Ángel García-Hernández, un mexicano de 32 años que resultó herido en el ataque armado ocurrido la semana pasada contra un centro de detención de migrantes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas en Dallas, Texas.
Muere migrante mexicano tras ataque en centro de detención
El atentado, registrado el 24 de septiembre, fue perpetrado por Joshua Jahn, un estadounidense de 29 años que disparó desde la azotea de un edificio cercano antes de quitarse la vida.
En el hecho murió de inmediato un migrante salvadoreño y dos personas más resultaron heridas, entre ellas García-Hernández, quien finalmente no sobrevivió a las lesiones.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum informó que el gobierno mexicano acompañó a la familia de la víctima en el proceso:
“Se hicieron todos los trámites para que su madre pudiera estar allá y se mantiene contacto con los familiares, brindando apoyo económico y moral”, señaló.
La mandataria agregó que se ha presentado una carta diplomática exigiendo a Estados Unidos una investigación exhaustiva sobre el caso y reiteró la disposición de su gobierno para respaldar cualquier acción legal que la familia decida emprender.
La Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos identificó a la víctima y compartió un mensaje de su esposa, Stephany Gauffeny, quien lo describió como “un buen hombre, un padre cariñoso y un proveedor para nuestra familia”.
Van dos muertos tras ataque en centro de detención en EE. UU.
De acuerdo con la fiscalía local, el atacante buscaba “aterrorizar” a los agentes de ICE, organismo que ha estado en el centro de la ofensiva migratoria del presidente Donald Trump.
Sus operativos, caracterizados por redadas en espacios públicos con agentes armados y enmascarados, han generado fuertes críticas de sectores demócratas y de organizaciones defensoras de migrantes.
El Departamento de Seguridad Nacional reveló que, desde el inicio del segundo mandato de Trump, los ataques contra instalaciones y agentes del ICE han aumentado en un 1000%, reflejando la tensión creciente en torno a la política migratoria estadounidense.

