Aciertos, desaciertos y pendientes: así les fue a los principales alcaldes en su primer año de gestión

Se cumplió el pasado 1 de enero el primer año en el poder de los actuales mandatarios locales y departamentales en Colombia; 365 días marcados por el surgimiento inesperado de una pandemia que además de significar un nuevo reto para las administraciones, representó en muchos casos el aplazamiento o postergación de muchos proyectos y promesas.

Noticias RCN hizo un recorrido por las principales ciudades del país para conocer el balance del primer año de gestion de sus respectivos alcaldes: Bogotá, Cali, Cartagena, Medellín, Bucaramanga y Barranquilla estuvieron bajo la lupa.

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Lo positivo, lo negativo, lo que aún está pendiente y lo que debe ser prioridad en cada una de las principales ciudades del país, son los ítems protagonistas de este recuento informativo del primero de cuatro años de gestion de los dirigentes que hoy ostentan las riendas y los destinos de las urbes más representativas de Colombia.

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Bogotá

Hace 12 meses, Claudia López asumió la batuta de la administración de la capital de la República, y su gestión en su primer año frente al cargo ha estado marcada por protestas, controversias y pandemia.

Precisamente, la alcaldesa Mayor de Bogotá ha sido una de las protagonistas de la lucha contra el coronavirus en nuestro país, siendo una de las mandatarias que dio el primer paso a la adopción de medidas, e incluso motivó a que el Gobierno Nacional también lo hiciera.

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No obstante, en muchos momentos de lo corrido de la emergencia, ha sido evidente su pugna y diferencias con el Gobierno Nacional frente a la hoja de ruta en el camino por evitar la propagación viral, llevando a que luego del desconfinamiento, Bogotá creciera exponencialmente como el territorio más golpeado por la pandemia en el país.

En virtud de lo anterior, López también se vio obligada a protagonizar una suerte de diferendo con el Gobierno central, en procura de obtener con premura el número requerido de ventiladores mecánicos para hacer frente a la emergencia en la red hospitalaria de la capital, logrando finalmente que el Gobierno Nacional cediera en pro de los ciudadanos de Bogotá.

En medio de la pandemia, López también fue cuestionada por “promulgar, pero no aplicar”, cuando ella y su pareja fueron vistas juntas hacienda mercado, violando su propia política de una única persona por familia hacienda compras.

Sin embargo, el covid no es el único inconveniente con el que debió lidiar López durante su primer año de mandato, pues en paralelo de ello, se enfrentó a una ola de protestas desencadenadas por el evidente abuso policial en el caso de la muerte del proyectado abogado Javier Ordóñez, situación que a su vez derivó en actos de vandalismo que pusieron en jaque a un importante número de CAI de la ciudad.

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Las protestas también llegaron de la mano de los comerciantes obligados a cerrar sus establecimientos comerciales en el marco de la estrategia para mitigar la expansión del coronavirus.

Otro de los asuntos polémicos del primer año de López en la Alcaldía de Bogotá deriva de las opiniones encontradas frente al incremento de la red de ciclovía en la ciudad, pues si bien estas se implementaron en el marco de la pandemia para incentivar el uso de medios alternativos de transporte, frente al riesgo de contagio al interior del sistema masivo, y abogan a su vez por la equidad para todos los actores viales, estas representan la reducción de un carril en algunas de las principales vías, generando a su vez mayor caos vehicular.

A lo anterior, se sumó el aparente incremento en el robo de bicicletas.

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En el transporte masivo, si bien durante la pandemia se redujo el número de robos, el aumento en los niveles de violencia de estos prendió las alarmas por la muerte, a manos de criminales, de un usuario de Transmilenio y un usuario del SITP, quienes fueron apuñalados al interior de los buses. Como parte de esta realidad, muchos otros usuarios han resultado gravemente heridos.

Dentro de la gestión de López al frente de la Alcaldía también se destaca la formulación y aprobación del llamado Plan Marshall para la reactivación económica, y la luz verde al llamado Corredor Verde de la Carrera Séptima, proyecto que desplazó al de la construcción de una troncal de Transmilenio por dicha avenida.

Claudia López comenzó su segundo año de gestión en medio de una polémica, después de haber decidido que tomará un descanso durante los primeros días de diciembre, delegando a su secretario de Gobierno como alcalde encargado, situación que ha despertado críticas provenientes de distintos sectores.

Medellín

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Cali

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Ibagué

Cartagena

Barranquilla

Para Jaime Pumarejo, el 2020, su primer año al frente de las riendas de la ciudad de Barranquilla fue un año de grandes retos, marcado por el amplio impacto de la pandemia sobre su población en materia no solo sanitaria, sino también socio-económica.

Al comienzo de la emergencia, Barranquilla sufrió un vertiginoso aumento de los casos de la enfermedad, llevando al gobierno local a tomar la decisión de “darle manejo”, entendiendo que la creciente curva de contagios en la ciudad no era evitable, y por ello centraron su estrategia en la práctica de la mayor cantidad posible de pruebas, con el objetivo de mitigar la expansión a través del modelo de asilamiento selectivo de las personas que ya habían contraído la enfermedad.

La ciudad vivió un momento difícil a mediados de año por cuenta del alto número de contagios, y el gran reto fue el fortalecimiento de la red hospitalaria y de Unidades de Cuidado Intensivo, logrando incluso, duplicar el número de camas UCI.

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Pumarejo señala que el elevado pico inicial permitió a la ciudad contar con una seroprevalencia alta, que a su vez facultó optar por una temprana iniciación de los procesos de reactivación económica que se reflejan en la baja tasa de desempleo de la arenosa.

Otro de los esfuerzos de la administración Pumarejo durante el 2020 en el escenario de pandemia se centró en propender por la educación en épocas de la migración a la virtualidad, a través de la identificación y ofrecimiento de alternativas a aquella población que por falta de recursos tenía problemas para acceder a las clases virtuales.

Sin embargo, el 2020 también estuvo marcado para la administración Pumarejo por la necesidad de cancelar algunos importantes eventos que estaban programados en la ciudad como por ejemplo la Asamblea del BID, y el aplazamiento de la Copa América, de la cual Barranquilla sería una de las sedes, y que representaría una gran oportunidad para el turismo y el comercio de la ciudad. Pese a que la administración

Pumarejo comenzó también con la inversión en infraestructura, y mostró resultados en materia de construcción de nuevos espacios de recreación, dentro de un sector de la población, aún se reclama mayor inversión en infraestructura y mayor destinación de recursos a ayudas sociales.

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Bucaramanga