Así se habría fugado de la cárcel de máxima seguridad de Cómbita el asesino de la patrullera Paula Ortega
Las autoridades buscan a Nelson Ocampo Morales, alias El Diablo, un peligroso disidente de las Farc condenado por el homicidio de la patrullera.
Noticias RCN
07:33 p. m.
Sigue la preocupación por la fuga de Nelson Ocampo Morales, alias El Diablo, condenado a 33 años de cárcel por el crimen de la patrullera Paula Ortega, ocurrido el 2 de agosto de 2023 en Neiva, Huila.
‘El Diablo’, un peligroso disidente de las Farc, se encontraba recluido en la cárcel de máxima seguridad de Cómbita, Boyacá, hasta la madrugada del pasado domingo 19 de octubre, cuando escapó burlando a las autoridades.
¿Cómo se fugó alias El Diablo de la cárcel de Cómbita?
De acuerdo con las primeras hipótesis, ‘El Diablo’ habría amarrado unas cobijas para salir por una ventanilla de su celda, junto a una segunda persona que no logró huir.
Se presume que los hechos sucedieron a la madrugada del domingo pasado, y que el sujeto era esperado por hombres afuera de la cárcel para apoyarlo en su plan en medio de la densa niebla que rodeaba el lugar.
Ocampo se encontraba encerrado en el pabellón 1 de la cárcel, en donde cumplen sus condenas algunos de los más peligrosos criminales del país.
Al parecer, alias El Diablo habría resultado herido por la concertina de cuchillas ubicada en la parte más alta del muro que aísla al patio 1 del exterior de la cárcel.
Por ahora, no se sabe nada de su paradero, y las autoridades han desplegado escuadrones de búsqueda en departamentos aledaños para recapturarlo.
La fuga de alias el diablo, integrante de las disidencias de las Farc, pone en duda la capacidad del Estado para garantizar la custodia de quienes representan un riesgo para la seguridad.
El crimen de la patrullera Paula Ortega
Los hechos por los que condenaron a Nelson Ocampo ocurrieron el 2 de agosto de 2023, cuando asesinó a sangre fría a la patrullera Paula Ortega a plena luz del día en Neiva, Huila.
Ese día, la joven de 28 años fue atacada mientras se dirigía a un CAI.
En vía pública, dos sujetos, entre ellos Ocampo, le dispararon para robarle su arma de dotación. La rápida reacción de sus compañeros permitió la captura de los criminales, quienes fueron posteriormente condenados por el homicidio agravado de la patrullera.


