En Caquetá 170 mujeres indígenas impulsan la conservación ambiental de la Amazonía
Mujeres de los pueblos Macaguaje, Coreguaje, Murui-Muina e Inga han construido una ruta de acción que rompe brechas históricas ambientales.
Noticias RCN
08:28 p. m.
En Solano, un municipio de Caquetá, atravesado por los ríos, la selva y los retos que impone la Amazonía, la conservación tiene hoy un rostro que durante décadas estuvo invisibilizado, el de las mujeres indígenas. Allí, 170 lideresas de 18 comunidades han comenzado a transformar la relación entre sus territorios y los proyectos ambientales que históricamente se construyeron sin su voz.
Este cambio ha sido posible gracias a un proceso impulsado desde 2021 por The Nature Conservancy (TNC) Colombia, que promueve un enfoque de género para fortalecer la gobernanza, la educación, la economía local y la gestión ambiental en la cuenca del río Caquetá.
La hoja de ruta de esta transformación es el Plan de Acción de Género de Mujeres Indígenas de Solano, elaborado junto a los pueblos Macaguaje, Coreguaje, Murui-Muina e Inga, quienes reconocieron que la conservación solo es sostenible cuando la participación es equitativa.
“Este plan recoge las voces de las mujeres y las integra de manera real en la toma de decisiones territoriales”, explicó María José Hernández, especialista en conservación basada en comunidades de TNC Colombia.
Formación de mujeres que abre el territorio ambiental al mundo
El fortalecimiento de capacidades ha sido uno de los pilares más visibles del proceso. A través del programa de becas en planificación estratégica de la conservación, 16 mujeres fueron formadas para diseñar e implementar proyectos ambientales desde sus propios territorios.
La experiencia ha trascendido fronteras. Dos becarias representaron a Colombia en un encuentro internacional realizado en Chile, mientras que 12 mujeres participaron en un intercambio en Ecuador con lideresas indígenas de la cuenca del río Napo. Además, el trabajo realizado en Solano llegó hasta la Conferencia Global de Acuacultura y Pesca en Bangkok, donde TNC Colombia destacó el rol femenino en el monitoreo y la gobernanza de los recursos pesqueros.
Monitores de pesca con mirada y voz de mujer
Si la pesca ha sido un oficio tradicionalmente asociado a los hombres, en Solano comenzó a contar una historia distinta. Diez de los 24 monitores comunitarios son mujeres y ellas fueron responsables del 23% de los registros en MiPez, una aplicación cocreada con las comunidades para documentar el estado de las poblaciones de peces.
Según Hernández, la transformación ha sido profunda:
Las mujeres siempre estuvieron cerca del proceso pesquero desde la preparación y el manejo alimentario, pero hoy cumplen un rol científico y comunitario que ha ampliado su reconocimiento.
Su labor no se limita a la recolección de datos. También lideran actividades educativas en escuelas locales, donde enseñan a niñas y niños sobre el cuidado del agua, la biodiversidad y las prácticas tradicionales que sostienen la vida en el territorio.
El liderazgo femenino también se expresa en la economía. A través de la asociación Canasto de la Abundancia, del pueblo Murui-Muina, artesanas elaboran tejidos y canastos con fibras de palma recolectadas de manera sostenible. Otros grupos transforman ají y yuca en productos que fortalecen la sociobioeconomía local y generan ingresos propios.


