“Hay menores involucrados” en la instrumentalización de grupos armados contra la fuerza pública: Néstor Osuna
El procurador delegado para los derechos humanos se refirió a la injerencia de estructuras armadas sobre la población civil que tienen secuestrados a 33 militares.
Noticias RCN
11:13 a. m.
Tras el secuestro de 33 miembros del Ejército Nacional por parte de la población civil en el municipio de El Retorno, Guaviare, quienes, al parecer, habrían sido instrumentalizados para retener a los militares por el asesinato de un ‘civil’, que sería un disidente.
La situación de orden público fue calificada por el procurador delegado para los DD. HH., Néstor Osuna, como “un secuestro”. La retención indicaría que ellos asumieron la posibilidad de confinamiento, que no sería la situación de los militares.
Se trata de un secuestro que habría sido cometido por miembros de una comunidad y que estarían siendo intimidados, instigados y atemorizados por miembros de estructuras ilegales.
¿Habría menores de edad instrumentalizados en secuestro masivo en Guaviare?
Osuna confirmó el uso indiscriminado de menores por parte de grupos armados para cometer sus acciones criminales en la región:
Hay menores de edad involucrados, lamentablemente tengo que decir que sí (…) ha incrementado enormemente el reclutamiento de menores. Utilizan menores con esa misma estrategia, llevarse al niño o niña de la familia para tener además a sus familiares a su plena disposición.
“También utilizar niños migrantes que llegan en inversa que retornan al país y lo reclutan”, dijo.
En cuanto a la participación de menores en el secuestro de los 33 militares, indicó:
No tengo información precisa sobre si en este caso de El Retorno haya habido menores de edad entre los secuestradores.
De acuerdo con Osuna, el uso de menores por parte de estas estructuras criminales “es usar menores de edad porque saben que para el régimen penal de adolescentes les puede garantizar mayor beneficio y mayor impunidad”.
Personas que secuestraron a militares serían judicializadas
El procurador delegado explicó que “una de las estrategias que están utilizando estas estructuras criminales de alto impacto es atemorizar a la población: las amenazan de muerte o con que le van a secuestrar a algún familiar o con que le van a incendiar la casa y así obligarlos a actuar de acuerdo con sus intereses”.
La prioridad es la liberación de estos militares, pero también y también la captura de las personas que cometieron este secuestro.
“Si ellas fueron instigadas amenazadas, atemorizadas por estructuras criminales, pues en el proceso judicial que se le sigue en contra podrán alegar eso y a lo mejor la pena no es tan alta como si fuera por su propia iniciativa criminal”, aseguró Osuna.
Es un crimen un crimen grave, una violación de derechos humanos y para los combatientes, por supuesto, es una infracción de derecho internacional humanitario que hace supremamente difícil continuar en una posibilidad pacífica de sometimiento a la justicia.


