Posible embargo de Reficar: ¿Qué impacto tendría?
En La Mesa Ancha analizamos esta situación.
Colombia enfrenta una compleja situación tras el cobro coactivo de 1.3 billones de pesos que la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) realiza a Ecopetrol-Reficar, en medio de lo que expertos califican como una crisis fiscal y energética simultánea que pone en riesgo la producción de combustible del país.
El cobro coactivo se origina por una nueva interpretación de la ley que modificaría el IVA del 5% al 19% para las operaciones de Reficar, refinería que opera en una zona franca. Esta decisión genera una paradoja: el Estado colombiano cobra impuestos a su propia empresa estatal, poniendo en riesgo las inversiones de capital necesarias para mantener la producción energética del país.
¿Por qué podría ser el embargo?
Según analistas, el gobierno se ha quedado sin caja y se ha dedicado a perseguir a los emprendedores desde Reficar hasta los más pequeños, describiendo una situación donde múltiples empresas enfrentan embargos y cobros que afectan su flujo de caja para invertir.
El déficit fiscal de Colombia alcanzará este año el 8%, una cifra que expertos califican como insostenible. Ante esta situación, el gobierno ha optado por intensificar los cobros tributarios en lugar de implementar medidas de austeridad.
La situación genera interrogantes sobre la estabilidad jurídica del país. Expertos advierten que hay gastos innecesarios. Esta percepción afecta la confianza de inversionistas tanto nacionales como extranjeros.
¿Una paradoja?
El cobro a Reficar plantea una contradicción fundamental: Colombia produce petróleo, pero, según esta interpretación tributaria, el combustible refinado se pagaría como si fuera importado, eliminando el beneficio de tener producción local. “¿Para qué producimos petróleo si nos va a costar lo mismo que si lo trajéramos de otro país?”, cuestionan analistas económicos.
Las zonas francas fueron creadas precisamente para ofrecer estabilidad tributaria y atraer inversión. El caso de Ecopetrol-Reficar no es aislado. Pequeños y medianos empresarios reportan situaciones similares, con embargos por el doble de la deuda, lo que compromete su capacidad de pagar nómina y mantener operaciones.
Si este cobro se materializa, el precio de la gasolina podría incrementarse entre 525 y 530 pesos adicionales por galón, impactando directamente el bolsillo de los colombianos en momentos de dificultad económica.

