Defensoría hace un llamado para tomar acciones en Catatumbo por disputa de grupos armados
En cuestión de semanas, se cumplirá un año desde que la escalada de los grupos armados comenzó.
Noticias RCN
03:52 p. m.
Faltando pocos días para que acabe 2025, la Defensoría volvió a referirse sobre la crítica situación que se vive en el Catatumbo desde hace casi un año.
La fecha como punto de partida fue el 16 de enero de 2025, cuando se sintió la escalada de los grupos armados. 11 meses después, la violencia persiste y la Defensoría alerta que se necesita atención inmediata.
Alerta en Tibú y El Tarra
Dos de los municipios más azotados han sido Tibú y El Tarra en Norte de Santander. Aquel 16 de enero fue el día en que una familia (incluyendo un menor de edad) fue asesinada por las disidencias. Para el ELN, fue una ofensiva.
A partir de ese momento, ha habido una disputa entre el Frente 33 de las disidencias y el ELN. Muestra de ello son las advertencias que hizo la Defensoría en la alerta 017, emitida el 29 de octubre.
Partiendo de la baja presencia del Estado, los grupos armados han centrado sus intereses en el narcotráfico y otras economías ilegales (como la minería ilícita). El resultado ha sido un ambiente de zozobra marcado por asesinatos, confinamientos, desplazamientos y reclutamiento, entre otros crímenes.
Recientes hechos violentos
En el reporte de la Defensoría, también se enfatiza el impacto que tiene Tibú como zona fronteriza con Venezuela, lo cual ha hecho que las estructuras cuenten con un corredor ilegal.
Una de las medidas que tomó el Gobierno fue la conmoción interior, pero para la Defensoría no fue suficiente. Otra acción relevante fue la creación de la Zona de Ubicación Temporal, a la que las disidencias debían trasladarse.
No obstante, el panorama no ha cambiado. Por ejemplo, entre el 14 y 28 de diciembre se reportaron desplazamientos, ataques con drones y combates.
Por eso, la Defensoría hizo una serie de recomendaciones de cara a 2026, tales como fortalecimiento estatal, aumentar la seguridad, construir rutas de atención, tener respuestas oportunas, evaluar los protocolos y para los grupos, cesar con los actos violentos.

